Rogamos que se lleven a cabo las reformas necesarias en las Leyes penales para que no sea la víctima la perdedora ante los beneficios del agresor. Por eso pedimos para delitos de asesinato, violación y pederastia el cumplimiento, al menos, de las 9/10 partes de la condena impuesta por el juez dentro del recinto penitenciario, no pudiendo acceder al 3º grado hasta el cumplimiento de este tiempo.
Parece que se criminaliza a la víctima con el Código Penal y la Ley de Enjuiciamiento Criminal existentes hoy en día, que están basados en artículos e interpretaciones de los siglos XIX y XX. Queremos que a la mujer que sufre maltrato o es asesinada se la considere víctima de 1ª clase y no como se la sigue considerando todavía de 2ª clase. El asesinato debe considerarse penalmente igual que el asesinato por terrorismo y la reinserción en la sociedad de los maltratadores debe ser con todas las garantías posibles y todos sabemos que el Estado Español, hoy por hoy no tiene medios económicos ni humanos para cumplir, el fin primordial que nos manda el Art. 25 – 2 nuestra Carta Magna, sobre la reeducación y la reinserción en la sociedad de las personas que han cometido un delito.